Comedia que se acerca al espíritu y al humor de las películas inglesas de la Productora Ealing. Un enredo muy humano y unos diálogos chispeantes, en un film en el que Hopkins (El silencio de los corderos) cambia por completo de registro para interpretar a un estricto consejero económico contratado para reflotar una pequeña empresa en la que nadie da ni golpe.