Jack, un atareado abogado inglés, lleva una vida idílica con su esposa Sarah, que está esperando su primer hijo. Todo se viene abajo cuando la madre muere tras dar a luz a una niña. De pronto, Jack se encuentra sólo y desorientado ante una nueva responsabilidad para la que no está preparado. Además, su absorbente trabajo no le permite hacerse cargo de la niña. A pesar de contar con la ayuda de su madre, su suegra y William, un vagabundo al que ha dado cobijo, Jack se ve obligado a buscar a alguien que cuide de la niña. Pese a la oposición de todos, contrata a una joven e inexperta camarera americana llamada Amy.