Ambientada en Bilbao, la trama de la serie se centra en la labor de Romina Goitia, Romi, una detective privada treintañera con un don innato para la investigación: es sorda, motivo por el que ha desarrollado una capacidad única para interpretar la comunicación no verbal y detectar la mentira. Romi complementa esta extraordinaria destreza con cierta tendencia a bordear la ley para cumplir sus objetivos, en contraste con el perfil extremadamente disciplinado y responsable de Patricia Irureta, su nueva compañera en prácticas.